Siete pasos para migrar tu negocio a la nube (sin morir en el intento)

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Siete pasos para migrar tu negocio a la nube (sin morir en el intento)

Ya estás listo para migrar todos tus sistemas a la nube; el CEO te ha dado luz verde para emprender el proyecto y tu CFO liberó el presupuesto que necesitas para hacerlo, pero… ¿qué sigue?

A continuación te compartimos siete pasos esenciales que debes tomar en cuenta para comenzar a ahorrar y modernizar tu negocio haciendo una migración completa de la infraestructura digital tradicional a un sistema en la nube de manera segura, efectiva y fácil.

Planea

Primero haz un diagrama de todos los sistemas que deben migrarse, su origen, la forma en la que son protegidos los datos que contienen y el método que utilizarás para pasarlos a la nube.

Esta es la parte clave para lograr una migración orgánica que concluya en el menor tiempo posible sin perder ningún kilobyte de información.

Aquí no solo planearás cómo pasas la información de una plataforma a otra, sino también cómo volverás a dejar el sistema justo como estaba antes… pero ahora viviendo en un ecosistema mucho más dinámico y adaptable como la nube.

Respalda

Antes que nada, no te olvides de respaldar tu información, pues nunca sabes cuándo o cómo se presentará un problema que acabe por extraviar información esencial.

Respalda, y vuelve a respaldar. No importa cuánto te tome, pues cuando el proceso de migración presente un problema y se pierda algo, vas a agradecer haberte tomado esas dos horas extra para respaldar cada bit que te haga falta.

Ten en mente que sólo podrás migrar todo un sistema si trabajas en un ambiente controlado en el que todo margen de error quede minimizado y toda probabilidad de falla desaparezca.

Elige cómo migrar

Hay distintas formas de migrar y por eso debes elegir la que mejor te convenga. Puedes escalar toda tu información a una máquina virtual para luego desplegarla en una estructura IaaS o redirigir la información a una plataforma PaaS que te permita elegir exactamente qué aplicaciones necesitas migrar primero antes de vaciar toda la información a la nube.

Existen varias maneras de pasar información alojada en medios on premise a la nube, pero para encontrarlas, recomendamos acudir a un experto que te entreviste para conocer tus necesidades exactas antes de recomendarte un método en particular.

Colabora

Echa mano de todos los recursos que tengas para llevar a cabo la titánica tarea de migrar toda la información digital de tu empresa a la nube. Recuerda que durante el proceso necesitas manos que te ayuden a proteger la información, controlar pequeñas crisis que puedan ir surgiendo y revisar que todos los sistemas estén ejecutándose correctamente.

También es importante avisarle a todo el equipo de trabajo (incluidos los empleados que no sean de TI) que harás una migración y que por eso podrían experimentar bajas en la velocidad de la conexión a internet o algunos problemas en la ejecución de apps esenciales.

Protege la conexión

Recuerda que para pasar información a la nube necesitas una conexión confiable y rápida; completamente libre de interferencias, vacíos de seguridad y peligros.

En caso de que se presente una falla, recuerda que siempre podrás respaldarla si tienes una conexión alterna que ayude a pasar el resto de la información sin que se pierda nada.

Aquí también entra la escalabilidad, pues un sistema que se adapte bien a los cambios, será el que mejor proteja el paso de tu información de un medio tradicional a otro más dinámico como la nube.

Monitorea

Una vez migrado todo, debes hacer pruebas, comprobar una y otra vez que todo esté funcionando bien, eliminar errores, dar soporte inmediato a todas las fallas que vayan surgiendo y volver a hacer pruebas de seguridad y desempeño.

Los instantes posteriores a la migración total serán los más tensos, pues este proceso, así como el aterrizaje de un avión, es crucial para que todo vuelva a funcionar justo como lo hacía antes de llegar a la nube.

Deja todo como estaba

 

Ahora que tú y tu equipo han hecho su trabajo, lo que sigue es asegurarse que todo esté funcionando a la perfección, y que, de hecho, trabaja mucho mejor que antes, pues no sólo le has ahorrado miles (o millones) a tu empresa en costos de logística y mantenimiento de viejos servidores on premise, sino que la has empujado al futuro digital.

 

Es tu oportunidad de demostrar que la tecnología de la nube es mucho mejor para tu compañía tanto financiera como técnicamente hablando, así que busca sacarle el máximo provecho al automatizar procesos, escalar ecosistemas y mantenerlos seguros sin la necesidad de que un equipo de TI de 15 personas lo esté monitoreando desde una oficina.


Entendemos que todo este tratado puede ser algo abrumador, pero recuerda que siempre habrá un grupo de expertos que pueden orientarte sobre los mejores sistemas, métodos y procedimientos para convertirte en un CIO capaz de resolver cualquier problema que se presente.

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